América hoy

El continente americano, es uno solo y todos somos americanos. Ese debiese ser nuestro rasgo identitario. Para que eso resulte globalmente, habría que convencer a los Estados Unidos de hoy, que América llega desde Alaska hasta Tierra del Fuego y que en efecto todos queremos ser mejores y más grandes americanos, unidos por la tierra, la historia y la genética.

Lo que hoy en día conocemos como América (por Américo Vespucio sólo hace 533 años) es el único continente que va desde la Antártica al Ártico, cruzando longitudinalmente todo el planeta emergido (aún). Por las investigaciones antropológicas, arqueológicas y genómicas, parece que América fue el último territorio que los humanos sapien-sapiens ocuparon[1], hace más o menos 25.000 años. Los verdaderos descubridores humanos de América fueron un grupo de Samoyedos del norte de Siberia. Ellos y sus descendientes tardaron unos 20.000 años en recorrer todo el continente, explorar, establecer grupos humanos, hasta llegar a la Patagonia (14000 -17.000 años), de acuerdo con los registros de Monteverde, Osorno[2] .

En 15.000 años – casi ocho veces el tiempo de nuestra era calendario – los descendientes de los samoyedos tuvieron tiempo de establecer muchos imperios, civilizaciones, generar cultura, desarrollar tecnologías, cultivar lenguas, construir pirámides, grandes ciudades, y enviar expediciones hacia el Sur. Cuando llegaron los españoles, los Aztecas ya tenían sanitarios con aguas en tiempos que en Europa la peste de los miasmas humanos mataba la mitad de la población. Antes de eso, estos grupos humanos recibieron, durante los dos últimos milenios, visitas de los vikingos, los japoneses y los pascuenses y probablemente, otros viajeros humanos, menos codiciosos y destructivos que los últimos visitantes. Estos últimos llegaron recién, de principalmente de cuatro imperios militares: el francés, el inglés, español, y el portugués.

Esas visitas, en realidad invasiones, ocurrieron los últimos 500 años. El proceso trajo consigo más de 60 millones de muertes de los nativos americanos, por acción de los conquistadores y las enfermedades. Además, los colonizadores importaron torturados en las sentinas de sus veleros seres humanos, esclavos provenientes de África, China y Polinesia.

Fernão de Magalhães, 1521, dirigió y no llegó al final de la primera expedición que dio la vuelta a la Tierra, que a pesar de la opinión cerrada de los sabios de la Universidad de Salamanca, era en verdad redonda y esférica, inaugurando así la reciente era de los largos viajes por mar. 400 años después se logró por aire, poniendo así al alcance de todo el planeta la posibilidad de visitar todos los rincones accesibles. Es así que hoy en día es posible encontrar una multiculturalidad de humanos, hasta en la Antártica que sería el ultimo continente que hemos visitado.

En América hoy existen unas 550 lenguas nativas activas. En Chile se reconocen 5 que aún se hablan, de 15 que había hace 100 años. El “español chileno”[3] las incorpora en términos, cadencias y variantes complejas, sumadas a palabras derivadas del inglés, el francés, italiano, alemán, el japonés, etc. De esta manera se ha formado el español chileno, siendo hoy una de las lenguas más dinámicas y difíciles de entender de América.

Considerando lo anterior, es posible mirar América, y Chile en el último rincón, como un todo geográfico y humano. A pesar de los cambios e influencias del domino europeo, aún quedan 45 millones de indígenas en el continente y su influencia genética en sus habitantes es aún mayor[4]. Los criollos, hijos de los invasores con indígenas, son la mayoría del continente. Se puede rescatar una gran identidad en el continente, única entre los demás continentes del planeta.

En total viven en el continente 1.036.000 habitantes repartidos en 35 países, donde se habla oficialmente español, inglés, portugués y francés.  A ello se agregan casi 550 lenguas indígenas activas. 212 millones de habitantes hablan portugués y 600 millones español. En Estados Unidos viven 40 millones de hispanos, mientras que el mayor país hispanoparlante es México con 130 millones. Además hay unos 300 millones de angloparlantes y cerca de 10 millones de francófonos

Esto significa que somos un continente de mayoría hispana, latina, muy entrelazado actualmente con las olas migratorias.

El continente americano, es uno solo y todos somos americanos. Ese debiese ser nuestro rasgo identitario. Para que eso resulte globalmente, habría que convencer a los Estados Unidos de hoy, que América llega desde Alaska hasta Tierra del Fuego y que en efecto todos queremos ser mejores y más grandes americanos, unidos por la tierra, la historia y la genética.

[1] https://www.nationalgeographic.com/pages/article/genographic

[2] https://www.monumentos.gob.cl/patrimonio-mundial/lista-tentativa/sitio-arqueologico-monte-verde.

[3] https://www.elmundo.es/cultura/2021/11/30/61a4a36321efa013518b4571.html

[4] https://www.bancomundial.org/es/region/lac/brief/indigenous-latin-america-in-the-twenty-first-century-brief-report-page#4

Pedro Serrano R.
Socio del Foro de Altos Estudios Sociales Valparaíso. Director Unidad de Arquitectura Extrema, UTFSM. Presidente de Fundación TERRAM para el desarrollo sustentable.