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Agustín Squella – Sigamos hablando de Liberalismo

“lo que predomina hoy en la discusión pública y académica es el debate al interior del propio liberalismo, o sea, la confrontación entre los varios troncos liberales. Felizmente caídos los llamados socialismos reales (que no fueron otra cosa que dictaduras comunistas), con un socialismo democrático a la baja, con una socialcristianismo aún más a la baja, y con una socialdemocracia muchas veces diluida en un blando y amorfo progresismo, cuando no rendida ante los criterios y prácticas neoliberales, lo único interesante parece ser aquella discusión que se da hoy al interior del liberalismo. Una discusión interna que va ganando el neoliberalismo, si no en la academia, al menos en la actividad política de gobiernos y parlamentos”

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Crisóstomo Pizarro – Hablemos sobre el Liberalismo

Hoy ha cobrado una inusitada importancia la discusión del significado del Liberalismo entre conocidos intelectuales y políticos chilenos como la historiadora Patricia Arancibia, el ingeniero matemático Álvaro Fischer y el cientista político y diputado Vlado Mirosevic

Esta columna, muy afín con el libro de Vlado Mirosevic, Libres e Iguales. Conversaciones con Agustín Squella (FCE Chile 2017), propone incluir en esta discusión algunos tipos de liberalismo que se apartan de las formulaciones teóricas del liberalismo clásico, especialmente en su dimensión económica, y del neoliberalismo. Más aún las investigaciones históricas de la macrosociogía (Immanuel Wallerstein) y macroeconomía (Thomas Piketty , Angus Deaton) han demostrado también cómo las promesas de bienestar material, libertad e igualdad declaradas por esas doctrinas no han podido aún realizarse históricamente.

Me referiré ahora a dos tipos de liberalismo alternativos: el liberalismo igualitario o democrático y su extensión a la sociedad de los pueblos en John Rawls y el liberalismo republicano de Jürgen Habermas sustentado en una moral universal. Las visiones de ambos autores no pueden asimilarse al liberalismo clásico, especialmente en sus dimensiones económicas ni mucho menos al neoliberalismo a escala global.

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Alonso Rodríguez – Impacto de las tecnologías de la información en el mercado del trabajo

El cambio tecnológico ha sido uno de los más grandes impulsores de las transformaciones sociales y económicas a lo largo de la historia, sino el que más. Los acelerados avances de las TIC, están enfrentando al mundo a una nueva Revolución Industrial, liderada por la automatización masiva de los puestos de trabajo, de la mano de la IA, que avanzan no solo en la superación de los límites físicos, sino en la superación de los límites mentales del ser humano.

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Guillermo Campero – Trabajo Decente y Diálogo Social

Desde la Plaza Tahrir, la Puerta del Sol o las calles Sudamérica, alrededor del mundo, estamos observando el nacimiento de movimientos sociales que expresan insatisfacción con nuestras sociedades. Insatisfacción, malestar, por la desigualdad, el abuso o la inequidad de oportunidades. Este es un reto de largo alcance para el Trabajo Decente. Una parte fundamental de estas situaciones se origina en el mundo del trabajo, en las asimetrías de estructuras productivas heterogéneas, en la primacía de la lógica financiera por sobre la economía real, de la especulación sobre la producción y la productividad.

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Crisóstomo Pizarro – Pesimistas supuestos antropológicos en que descansa el capitalismo.

El sistema capitalista se funda en la creencia que define al ser humano como un ser esencialmente egoísta, cuya conducta sólo puede responder a incentivos individuales y materiales relacionados con el dinero, poder y prestigio. Para Albert Hirschman este es un cuestionable supuesto de la economía clásica y neoclásica que ignora que las personas pueden actuar, y de hecho así lo hacen en muchos casos, por otros motivos relacionados con los valores de la solidaridad

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Pedro Serrano – El precio actual de la electricidad es un homenaje a los soñadores sansanos del siglo XX

“… aquellos que hace 40 años decíamos que usando solo energía solar podríamos alimentar con electricidad limpia a Sudamérica, demostramos que no estábamos tan equivocados. Se rieron de nosotros, pero esta historia nos reivindica, y sobre todo, hace un homenaje a aquellos precursores, muchos de ellos sansanos, que buscaron un futuro solar para la Humanidad”.

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Immanuel Wallerstein – Incertidumbre caótica

Los vaivenes extremos son el pan y la mantequilla de una crisis estructural. Esto significa que viviremos en incertidumbre caótica hasta que la crisis estructural se resuelva en favor de uno de los dos dientes de la bifurcación. Si nos concentramos en el supuesto significado de los vaivenes extremos y con frecuencia momentáneos, estaremos condenados a actuar de un modo irrelevante.

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